¡GRACIAS A LA VIDA QUE NOS HA DADO ESTA TÍA LÚCIDA, GENEROSA Y CON HUMOR!
Cuando era chica ella me festejaba los cumples, hacía los bocaditos, la torta, el cotillón y adornaba con papel crepe todos los muebles. Como si esto fuera poco, muchas veces me hizo el vestido y hasta las chatitas con cuerina.
Vive en Nueve de Julio en la casa de mis abuelos donde yo nací y nos hablamos por teléfono día por medio, son largas charlas sobre política sobre todo, pues conoce cada detalle de lo que sucede en el país, dice «nadie me aparta de C5N» y siempre tiene un comentario irónico sobre los acontecimientos.
Pero no sólo nos une la pasión por lo social y político… también amamos las plantas. Ella atiende personalmente su jardín y me llama entusiasmada cada vez que nace una flor nueva.
Cuando la visitamos jamás nos vamos con las manos vacías, siempre tiene para regalarnos algún mantelito de hilo, una tetera antigua, limones de sus plantas, viejas fotos de familia o los kinotos y las naranjas en almíbar que ella misma prepara.
¡TE ADORO, TILITA de mi CORAZÓN!
Su adolescencia en el patio de la casa. Tila está de pie.
Sentadxs: en primer plano la tía Kicha y detrás mi mamá Necha. Los varones son Roberto y Pichón. Todxs Irigoitias. (Son sólo 5 de los ocho hermanxs)