EL ORGULLO DE HABER COMPARTIDO CON UN ARTISTA GIGANTE
La navaja está arraigada a la cultura española y aparece en varias obras de la literatura clásica como en algunas de Cervantes. En el pasado existía la costumbre de «tomar la faca» que suponía el paso de niño a hombre dentro del seno familiar. La ceremonia era un baile en el pueblo que en determinado momento se interrumpía para que el hijo tomara solemnemente la faca de manos de su padre. Así era utilizada de generación tras generación y adquirió una fama desmerecida por la gente de mal vivir cuando, en realidad, era la herramienta del humilde que se valía de ella en el campo y las cacerías.
Una faca así, de 44 cm, es la que Gades introduce en su maravillosa versión teatral y coreográfica de «Bodas de Sangre» de García Lorca y con ella se matan los dos hombres en la inolvidable escena del duelo donde los dos enamorados pelean por el honor.
En cuarentena aparecen recuerdos de otras tierras amadas.
La faca cerrada mide 24 cm y es de material noble como el acero y las astas de procedencia animal. Tiene un mecanismo que impide que se abra sola.
La faca andaluza en toda su extensión.
Duelo con faca andaluza en un dibujo de Gustavo Doré.